Problemas Digestivos en gatos y perros
Los trastornos gastrointestinales en nuestros perros y gatos son una de las causas más frecuentes de visita al veterinario. Entre ellos encontramo...
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Las glándulas o sacos anales pueden impactar a los perros que han sido alimentados con alimento de poca calidad y cuyos sistemas digestivos y elim...
Comúnmente la diarrea es asociada con comer en exceso, reacciones a tóxicos, infección viral y a sensibilidad a cierta comida. También hay casos en...
La constipación es un síntoma común asociado por la deshidratación, el estrés o a una dieta tóxica. La constipación puede dañar al cuerpo y debilit...
Si bien es cierto que el embarazo no es un padecimiento es conveniente destacar que muchas mascotas manifiestan síntomas de salud o emocionales mie...
Las bolas de pelos pueden ser causa de gran frustración para el dueño de un gato (inclusive algunos dueños de perros). Desafortunadamente, uno se llega a enterar que su gato tiene bolas de pelos hasta cuando ve la evidencia: vomito en la alfombra.
Algunos animales son proclives a ingerir pelo cuando se cepillan a sí mismos o a otros, con su propia boca. Una nutrición de baja calidad estimula el desarrollo de las bolas de pelos. Las dietas que tienen gran cantidad de rellenos y grasas animales promueven la colecta de pelos en el tracto intestinal y el estómago. El pelo no es digerible, tiene que moverse a través del tracto digestivo. Las dietas de prescripción que pretenden la prevención en realidad son perjudiciales para la salud digestiva a largo plazo debido al alto contenido fibroso (a menudo proveniente de ingredientes severos como las cáscaras de cacahuate o cartón reciclado e inclusive aserrín, ingredientes que pueden causar el síndrome de intestino irritable).
El apetito es el mejor calibrador que tienes para decidir cuándo hay un desequilibrio presente. Ciertamente, cuando existe la presencia de cualquier síntoma que no entiendes o no te sientes confortable con él, lo mejor es procurar el diagnóstico de un veterinario para con ello desechar cualquier otra condición más grave como lo puede ser un órgano inflamado, una infección viral o una infestación de parásitos.
La Giardia es comúnmente vista en mascotas que beben de charcos o de cubetas con agua sucia que es donde se desarrolla el protozoario. Las fuentes (baños de aves) puede ser una fuente de infestación particularmente difícil de controlar, dado que a muchos perros de razas grandes les encanta beber de allí. Crea una aflicción digestiva de leve a severa resultando en diarrea, inclusive pérdida de peso. La infestación crónica puede acarrear desordenes intestinales severos. Estos síntomas secundarios deben atenderse de acuerdo a la necesidad mientras se elimina la infestación de parásitos y se restablece el tracto intestinal.
Los síntomas de la Colitis o Síndrome del Intestino Irritable se relacionan, comúnmente, con el estrés. Esto puede deberse a estrés generado al medio ambiente en el que vive, pesticidas que se encuentran en el piso y llegan a la mascota cuando ésta se lame las patas o su cuerpo, también por cuestiones genéticas. Las mascotas que son muy emocionales crean estrés en su sistema inmunológico y en su tracto digestivo lo cual inicia la disfuncionalidad. Esto se presenta más a menudo que otros factores como las alergias a los alimentos, infecciones bacteriales, infestación por parásitos o por enfermedades metabólicas. El estrés constante de cualquier condición crónica, combinada con un exceso de toxinas en su organismo, también puede resultar en diarrea, constipación (o una alternancia entre las dos), heces cubiertas con mucosa, flatulencia e inclusive heces con sangre.