Síndrome de Hiperestesia felina
El Síndrome de Hiperestesia Felina o Síndrome de piel inquieta es una condición caracterizada por una ondulación de la piel en la espalda del gato, especialmente cuando ellos se lamen o son acariciados en la región de la espalda baja.
Algunos veterinarios son de la creencia de que es una forma de epilepsia suave, una teoría que consideramos verdadera ya que se sospecha que los aditivos y químicos incluidos en algunos alimentos para mascotas son los causantes primarios, también se han detectado casos en los que desarrollan este síndrome después de ser vacunados. Dado que este comportamiento extraño solo se ve en gatos que son muy nerviosos, como los siameses y los Himalaya, se le considerada comúnmente como un desorden del comportamiento.
Independientemente de la causa, puede ser muy frustrante ser testigo de este comportamiento. Entre los síntomas están aquellos en los que un gato se lame o se muerde su trasero de forma obsesiva, esto aparece a menudo cuando se les distancia o son retirados de la familia; otro es que al dar brincos se retuerce a mitad del aire sin razón aparente o correr como un rayo para atacar objetos imaginarios o reales, incluyendo a sus propios dueños. Los medicamentos sedativos o compuestos de la Progestina son las rutas médicas tradicionales, por cierto, no tienen mucho éxito.
El protocolo “Lifestyle” del Cuidado Holístico de las Mascotas de Azmira puede revertir rápidamente estos comportamientos mediante el uso de remedios que tranquilizan y además rebalancean las hormonas como los descritos para Epilepsia.
Nota importante.- El protocolo del cuidado holístico de las mascotas no es para utilizarse en lugar del cuidado de un veterinario. El cuidado holístico de las mascotas de Azmira funciona mejor con el respectivo soporte médico, cuando se considere apropiado, como lo son los exámenes clínicos, análisis de sangre, rayos X, etc. conforme se requieran para un diagnóstico válido. El uso de medicamentos debe considerarse en situaciones en las que se amenace la vida de la mascota y todos los protocolos sugeridos deben de ser seguidos por un médico veterinario de su confianza para asegurarse de que el proceso curativo está beneficiando a la mascota y determinar los cambios cuando apliquen. Los análisis de sangre, análisis de orina o muestras de heces demostrarán si el protocolo elegido por el propietario está funcionando.
Para una eficiente elección de los productos o protocolos sugeridos debe existir un diagnóstico formal previo por parte de un médico veterinario.